Es la fecha límite para que los aeropuertos internacionales de Colombia tengan las adecuaciones de seguridad ordenadas por AEROCIVIL, es un plazo ya ampliado y ahora inamovible.
Si Matecaña no las cumple perderá su calidad de internacional, que no podrá recuperar porque hay otro, el de Armenia, operando a menos de 50 kilómetros.
Hace un año dijimos en esta columna: “En la misma forma que perdimos el manejo de las empresas de Aseo y de Energía, perderemos el manejo de nuestro aeropuerto, para que siga operando”. En ese momento aún existía la posibilidad de hacer las inversiones de la pista con dineros del municipio.
Si Matecaña no las cumple perderá su calidad de internacional, que no podrá recuperar porque hay otro, el de Armenia, operando a menos de 50 kilómetros.
Hace un año dijimos en esta columna: “En la misma forma que perdimos el manejo de las empresas de Aseo y de Energía, perderemos el manejo de nuestro aeropuerto, para que siga operando”. En ese momento aún existía la posibilidad de hacer las inversiones de la pista con dineros del municipio.
Un año después, todo parece indicar que ya no hay retorno.
La Administración del Municipio presentó al Concejo Municipal, a menos de 60 días de las elecciones, un proyecto de acuerdo que cede parte de los ingresos futuros del Matecaña para financiar su proyecto de mejoramiento. Inmediatamente fue satanizado por razones de la actual coyuntura electoral. No pudo escoger un momento menos oportuno, los concejales le temen al costo político que implicaría aprobar el proyecto.
Anteriormente el Alcalde reunido con algunos concejales les había informado de sus planes sobre el Aeropuerto, que incluyen un inversionista foráneo, esa “información” la recibieron como un insulto porque el Concejo es coadministrador del municipio. No creyó entonces el mandatario que necesitaría la aprobación del Concejo
Además de la inoportunidad de la presentación, fue equívoco el tortuoso y torpe procedimiento que nos condujo a este punto: La intención de concesionar el aeropuerto siempre se quiso ocultar con eufemismos, en los más de 3 años de este gobierno, el municipio no priorizó las obras de seguridad de la pista que valen unos $25 mil millones.
No obstante que los trabajos para que el aeropuerto mantenga su actual categoría 4C se han estimado en $110 mil millones, el Municipio insiste en buscar $200 mil, que es el costo para llevarlo a la categoría 4D, apto para vuelos intercontinentales, que aun no son una necesidad local.
La Administración Municipal nunca tocó las puertas del gobierno nacional buscando financiación para adecuar el aeropuerto, aunque ahora diga lo contrario.
Aquí denunciamos que en el Plan Nacional de Desarrollo, vigente, Risaralda es el departamento con menor inversión para infraestructura aeroportuaria, sólo $63 millones para 3 años.
El panorama actual de Matecaña es como sigue: La posibilidad de financiar las obras con recursos de crédito es muy remota por el nivel de endeudamiento del municipio que de acuerdo a cifras de la prensa se ha incrementado en más del 500% y debe cerca de $110 mil millones.
Sí se espera al nuevo Concejo para aprobar la concesión, no alcanzarían los 15 meses, hasta abril de 2013, para constituirla y contratar y ejecutar las obras.
No podemos descalificar la concesión a priori, porque en el mundo hay muchas que funcionan y en el caso de Matecaña, tendría la virtud de garantizarnos la permanencia del aeropuerto en Pereira, que es, desde la óptica de la competitividad, lo más importante para la ciudad.
La Administración del Municipio presentó al Concejo Municipal, a menos de 60 días de las elecciones, un proyecto de acuerdo que cede parte de los ingresos futuros del Matecaña para financiar su proyecto de mejoramiento. Inmediatamente fue satanizado por razones de la actual coyuntura electoral. No pudo escoger un momento menos oportuno, los concejales le temen al costo político que implicaría aprobar el proyecto.
Anteriormente el Alcalde reunido con algunos concejales les había informado de sus planes sobre el Aeropuerto, que incluyen un inversionista foráneo, esa “información” la recibieron como un insulto porque el Concejo es coadministrador del municipio. No creyó entonces el mandatario que necesitaría la aprobación del Concejo
Además de la inoportunidad de la presentación, fue equívoco el tortuoso y torpe procedimiento que nos condujo a este punto: La intención de concesionar el aeropuerto siempre se quiso ocultar con eufemismos, en los más de 3 años de este gobierno, el municipio no priorizó las obras de seguridad de la pista que valen unos $25 mil millones.
No obstante que los trabajos para que el aeropuerto mantenga su actual categoría 4C se han estimado en $110 mil millones, el Municipio insiste en buscar $200 mil, que es el costo para llevarlo a la categoría 4D, apto para vuelos intercontinentales, que aun no son una necesidad local.
La Administración Municipal nunca tocó las puertas del gobierno nacional buscando financiación para adecuar el aeropuerto, aunque ahora diga lo contrario.
Aquí denunciamos que en el Plan Nacional de Desarrollo, vigente, Risaralda es el departamento con menor inversión para infraestructura aeroportuaria, sólo $63 millones para 3 años.
El panorama actual de Matecaña es como sigue: La posibilidad de financiar las obras con recursos de crédito es muy remota por el nivel de endeudamiento del municipio que de acuerdo a cifras de la prensa se ha incrementado en más del 500% y debe cerca de $110 mil millones.
Sí se espera al nuevo Concejo para aprobar la concesión, no alcanzarían los 15 meses, hasta abril de 2013, para constituirla y contratar y ejecutar las obras.
No podemos descalificar la concesión a priori, porque en el mundo hay muchas que funcionan y en el caso de Matecaña, tendría la virtud de garantizarnos la permanencia del aeropuerto en Pereira, que es, desde la óptica de la competitividad, lo más importante para la ciudad.
Autor: Corporación Risaralda Etica
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